Los antiguos Dioses eran los dueños de la tierra y de los distintos reinos que en ella existe, no temían de nada ni de nadie ya que lo que hay y existe ellos lo crearon; solo algo se les escapó de su infinita sabiduría, que, al crear al hombre, este tambien fue dotado de una pequeña brisna de sapiencia en comparación de sus creadores, reflejo burdo de aquellos soles; y el hombre aprendió y descubrió, buscó y encontró, todo lo que hay a su alrededor, lo que se oculta debajo de la tierra y en lo profundo de los mares. Y el hombre reinterpretó, comprendió y creó y se recreó a si mismo..... Y a la par que todo descubría y aprendía también olvidaba, y entonces los Dioses temieron; por primera vez, en el tiempo de los tiempos los Dioses sintieron miedo, temor, se acercaron al hombre, pero este les evadió, intentaron hablar con el hombre, pero este no los escuchó, se revelaron ante el hombre, pero el hombre no les reconoció. Y el hombre olvidó, olvidó su origen, olvidó a sus creadores y por consiguiente los Dioses murieron en ese olvido , y por ultimo, olvidó su bien mas preciado, el mejor y mas bello regalo de los Dioses. La verdad.
Desde entonces el hombre vaga por el mundo solitario, llenando su ansia con todos los animales de la tierra, destruyendo y aniquilando todo a su paso, engrandeciéndose de sus miseros logros, inventando nuevos dioses a su imagen y semejanza, elevándolos por encima de sus cabezas, buscando eso preciado que olvidó, el mayor regalo que le fue dado, su mayor tesoro en este mundo. La verdad
martes, 17 de marzo de 2015
Busqueda
sábado, 16 de enero de 2010
hallazghoz
De tanto buscarte olvidé hasta mi nombre.
Entre la temprana infancia te manifestabas
Señales que solo se ven con paranoia, con esperanza.
ante los iluminados te descubres como el ruido de los grillos en el el monte
perpetua busqueda en el hexagrama, en el angulo conspicuo, en el circulo de la vida.
y te encontré, impavida, sin más, apareciste.
desde el tiempo y antes de todos los tiempos, eras.
Eres y yo ya sabia que existias, que rondabas en la sombra de la palabra no dicha, en el color no plasmado, en la nota que se olvida al despertar, en el momento antes de actuar.
tenia que buscarte, que seguir tu pista, en el insomio de la pitonisa, urgando en el futuro incierto, en la baraja desgastada que cargo siempre, pasabas de un lado a otro en el filo de la contemplación, caminabas en el velo de lo desconocido
Y ahora que hago, que te digo, como actuó, si de tanto esperarte olvidé hasta mi nombre,
De tanto buscarte olvidé hasta mi nombre.
Entre la temprana infancia te manifestabas
Señales que solo se ven con paranoia, con esperanza.
ante los iluminados te descubres como el ruido de los grillos en el el monte
perpetua busqueda en el hexagrama, en el angulo conspicuo, en el circulo de la vida.
y te encontré, impavida, sin más, apareciste.
desde el tiempo y antes de todos los tiempos, eras.
Eres y yo ya sabia que existias, que rondabas en la sombra de la palabra no dicha, en el color no plasmado, en la nota que se olvida al despertar, en el momento antes de actuar.
tenia que buscarte, que seguir tu pista, en el insomio de la pitonisa, urgando en el futuro incierto, en la baraja desgastada que cargo siempre, pasabas de un lado a otro en el filo de la contemplación, caminabas en el velo de lo desconocido
Y ahora que hago, que te digo, como actuó, si de tanto esperarte olvidé hasta mi nombre,
martes, 25 de agosto de 2009
pos opus
ante la incandesente luz de la blanca mañana
se perturba la vista, pesa, duele, es demasiado, retrocedo
ante un ataúd de sabanas de algodon y almohadas mancilladas
paga su cuota el vientre, despues de una noche lobrega de placeres mundanos
virilidad entumecida, amoratada que se refugia como lechuza de las mil noches en vela, que por fin duerme.
caín está impávido,la luz quema, lasivia por el suelo se queja y retuerce,
despues de un huracan, la calma es música de aturdidos, el silencio atonta, afecta los sentidos que aún desvarian
escapar de ese vertigo de azufre y copal, voragine que trata de fugarse por la boca.
dulce flor que marchita en la copulación, aureola de lívidos sabores, exploción en do menor que aún da vueltas en la cabeza, murmullo que se apaga, que se borra, la luz penetra en todo, aunque tenga los ojos cerrados inunda la oscuridad de la mente, la osucridad de las oscuridades,
y así, suspendido en la blanca mañana, se retira el letargo.
resucita el eterno dolor de cabeza
se perturba la vista, pesa, duele, es demasiado, retrocedo
ante un ataúd de sabanas de algodon y almohadas mancilladas
paga su cuota el vientre, despues de una noche lobrega de placeres mundanos
virilidad entumecida, amoratada que se refugia como lechuza de las mil noches en vela, que por fin duerme.
caín está impávido,la luz quema, lasivia por el suelo se queja y retuerce,
despues de un huracan, la calma es música de aturdidos, el silencio atonta, afecta los sentidos que aún desvarian
escapar de ese vertigo de azufre y copal, voragine que trata de fugarse por la boca.
dulce flor que marchita en la copulación, aureola de lívidos sabores, exploción en do menor que aún da vueltas en la cabeza, murmullo que se apaga, que se borra, la luz penetra en todo, aunque tenga los ojos cerrados inunda la oscuridad de la mente, la osucridad de las oscuridades,
y así, suspendido en la blanca mañana, se retira el letargo.
resucita el eterno dolor de cabeza
miércoles, 22 de julio de 2009
musicahoz
Un momento
un instante
la perjuria de la soledad se hace presente
Se disipa ante la luz, ante la iluminación del regaño
Vuelve
se asienta
se instala y vive
soledad.
Dolor amasado a golpes de castigos,
rebeldía que se consagra en la humillación
Deseo -si- deseo de deshebrar en la noche del odio la norma moral,
alzar el vuelo aunque duela y desgarre,
Y el inquebrantable sufrimiento, aunque aparezca la felicidad, ésta da miedo… asusta
Se conoce más la antigua soledad.
Pandemónium de tristeza, agonía de la irrisoria fortuna, no importa
Dinero
Amor
cosas vanas
se presentan de espaldas entre la torpeza de una mente que sueña que ríe
Opulencia que no existe, abismo entre las piernas de una mujer donde se pierde el mundo
Carisma nato que se acostumbra a todo,
sin embargo
Se conoce más la antigua soledad
La guerra está presente, camina de un lado a otro, gime, llora, grita,
se regocija, hace eco en una cabeza cansada, harta, que gime, llora
que grita aunque guarde silencio… sueña que ríe
Momento que queda en la memoria, sopor oloroso a hachís y peyote
sudor de alcohol, mente en blanco,
muchedumbre alegórica, regresiva tentación
placeres en una mano, en otra, un micrófono lleno de saliva
Alecto llama a los corazones, Tisifone hurga en la memoria, Megera seduce.
Pero se conoce más la antigua soledad.
Se conoce más la antigua soledad
La guerra está presente, camina de un lado a otro, gime, llora, grita,
se regocija, hace eco en una cabeza cansada, harta, que gime, llora
que grita aunque guarde silencio… sueña que ríe
Momento que queda en la memoria, sopor oloroso a hachís y peyote
sudor de alcohol, mente en blanco,
muchedumbre alegórica, regresiva tentación
placeres en una mano, en otra, un micrófono lleno de saliva
Alecto llama a los corazones, Tisifone hurga en la memoria, Megera seduce.
Pero se conoce más la antigua soledad.
martes, 21 de julio de 2009
intermedio
y bajo los augurios de planicies de palabras que dudan en hablar
sucumbe el animo ante el desaforado movimiento
tensión, la invasión de dedos claudican el humedo espacio
urgando en el veneno, lamiendo la voragine de fluídos pastosos
son cuando más ladrones de arte sacro en el santicimo
contemplando la majestuosidad del silencio, la precencia de lo inexistente
y sin embargo tan material, tan valioso, hermosa decantación
insalubre porpuesta, desvariada aceptación, gloriosa perversión.
y si muriera así.
sucumbe el animo ante el desaforado movimiento
tensión, la invasión de dedos claudican el humedo espacio
urgando en el veneno, lamiendo la voragine de fluídos pastosos
son cuando más ladrones de arte sacro en el santicimo
contemplando la majestuosidad del silencio, la precencia de lo inexistente
y sin embargo tan material, tan valioso, hermosa decantación
insalubre porpuesta, desvariada aceptación, gloriosa perversión.
y si muriera así.
miércoles, 15 de julio de 2009
Cúlmen
y en la suve entrepierna del dilirio
donde no pasa el tiempo, donde no hay tiempo
perfumadas vuelan las ecxéquias del momento
donde los gritos saben a sal y ververean
gemidos de rojo lacerante
tertulia de cabellos que danzan ante la marea de cuerpos
píes que comulgan en un vallado de sabanas graciles
adormecida la conciencia, imperio del deseo
dulzura, firmeza, arrogancia, plenitud
si muriera así
donde no pasa el tiempo, donde no hay tiempo
perfumadas vuelan las ecxéquias del momento
donde los gritos saben a sal y ververean
gemidos de rojo lacerante
tertulia de cabellos que danzan ante la marea de cuerpos
píes que comulgan en un vallado de sabanas graciles
adormecida la conciencia, imperio del deseo
dulzura, firmeza, arrogancia, plenitud
si muriera así
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